Sábado 1 de abril de 2017, un día muy soleado y despejado, me levante aproximadamente a las 6 A.M,, tenía que hacerle unos mandados a mi mamá en el centro de la ciudad, rápidamente me bañe, me aliste ,salí aproximadamente como a las 7 de la mañana.
Me dirigí hacia unas ferias que hace el instituto de mercadeo agropecuario de Panamá en donde se vende productos de alimentación a precios bajos en donde todos los pueden adquirir directamente con los productores y empresas fabricantes.
Luego de haber comprado lo que mi madre me había pedido me dirigí a tomar el bus que iba hacia el centro de la ciudad, andaba con mi maleta bien llena , pesaba demasiado
Llegué al centro de la ciudad , me dio ganas de comprarme un helado con gelatina y me fui a una panadería que estaba muy cerca de donde yo estaba y lo compre , me costo aproximadamente 1.50 $ , después de eso me fui al parque a comérmelo y en verdad estaba muy delicioso, que quede con ganas de comprarme otro pero en ese momento me acordé que tenia que ahorrar dinero. cuando termine , saque mi celular para revisar si alguien me había escrito por washapp y respondí unos mensajes , vi la hora, eran las 9.12 a.m.
Después de eso me dirigí a la parada que se encontraba frente a un local de FRAICHE , un lugar en donde se venden esencias de perfumes, como a las 5 minutos venia el bus de la barriada, yo me subí rápidamente después se subió una señora que yo le calcule que tenía aproximádamente unos 56 años y de ultimo se iba a subir otra señora que tenía aproximadamente unos 72 años, se le podían observar las piernas muy hinchadas , ella se me queda viendo y dijo estas palabras: hijo me puedes ayudar a subir que no aguanto las piernas ,me duelen mucho, yo rápidamente me levante a ayudarla, le di la mano para que se agarrara de mí y poder subir al bus, luego procedí a sentarla lo más cerca posible.
Al ella sentarse yo note que salían lagrimas de sus ojos y los que estábamos cerca le preguntamos, mamita que le sucede y ella nos responde no aguanto las piernas, me duelen demasiado , estoy muy triste.
Procedió a contarnos que tenía tres hijos y que dos de ellos estaban privados de libertad en la carcel de la joya, los habían condenado a 25 años de prisión, el otro había fallecido, que ella no tenía a nadie que la respaldara , estaba completamente sola sin esperanza de nadie, que una señora le había dado para dormir en el gallinero, hacia sus alimentos en una lata de leche de esas que le dan a los bebes, y tenía un fogón que había hecho de dos piedras.
Nosotros le preguntamos que si ella había acudido a las autoridades a pedir ayuda y nos respondió que había ido a la gobernación de la ciudad de David y no la habían ayudado, entre sollozos y lagrimas en sus ojos se podía ver el sufrimiento por el que pasaba aquella abuela.
Los que íbamos en el bus procedimos a ayudarla económicamente , ella nos agradeció y nos deseo la bendición del cielo por ser tan solidarios con ella.
El bus había llegado al lugar donde se tenía que bajar , yo la ayude a que se bajara con mucha delicadeza para evitar que le doliera tanto las piernas , sus palabras fueron las siguientes: gracias hijo, que el señor todo poderoso te ayude,yo la abracé y me despedí de ella.
Es difícil ver como las personas sufren por la perdida de un hijo, o que estén en la cárcel, no hay nada que se comparé con el dolor que sufre una madre desamparada sin nadie que la ayude y sin esperanza.